Ponentes invitados
Dentro y fuera. Picasso y el franquismo
María Dolores Jiménez-Blanco
Picasso fue una ausencia muy presente en los primeros años del franquismo. Mientras sucesivas exposiciones, publicaciones y homenajes tanto en Estados Unidos como en Europa le hacen cada vez más consciente de su entrada en la historia, su figura le devuelve al presente español de diversas formas. Frente a los artistas en el exilio aparece como referente ético, y frente a los del interior como recuerdo de la borrosa modernidad de los treinta que pervive en los cuarenta, y que se afianza e incluso se oficializa en los cincuenta en el contexto del inicio de la guerra fría. Paralelamente, desde el punto de vista del régimen su figura se metamorfosea a medida que se pasa de la década de los cuarenta a la de los cincuenta, volviéndose más y más poliédrica: el peligroso opositor comunista y autor de Guernica llega a convertirse en paradójico objeto de deseo y admiración, pero también de disputa y de chanza.